La visita al Monasterio de Oseira es una experiencia única, ya que se trata de una visita guiada por los propios monjes. Abandonado tras la desamortización en el siglo XIX, los monjes retornaron en 1929 y emprendieron la tarea de la reconstrucción del monasterio.
Destacan en su interior sus tres claustros, monumentales escaleras y la gran joya oculta de Oseira: la "Sala de las Palmeras", antigua sala capitular del siglo XV cuyas nervaduras, que surgen directamente desde columnas torsionadas y sin capiteles, recuerdan a palmeras.
Los horarios de visita al Monasterio están sujetos a cambios por la actividad litúrgica de los monjes. Sin lugar a dudas, merece la pena una visita.