El paisaje de As Catedrais parece sacado de otro mundo. Es fácil sentirse pequeño cuando se contemplan los enormes monumentos de roca tallados por las fuerzas de la Naturaleza a lo largo de miles de años.
En realidad, As Catedrais es un nombre turístico, ya que el nombre tradicional de esta playa es Augas Santas. Se trata de un entorno muy sensible y no exento de peligros. Las rocas del interior de las cavernas se desprenden con facilidad, por lo que está prohibido entrar en ellas, y la marea puede subir rápidamente, por lo que la visita debe realizarse durante la bajamar.
Debido a la gran afluencia de visitantes y a que se trata de un espacio natural muy frágil, durante el verano el número de visitantes que pueden acceder a la playa está restringido, por lo que deberás realizar una reserva con hasta 30 días de antelación. En la misma web de reservas de la Xunta de Galicia puedes solicitar una visita guiada que te ayudará a entender mejor la historia de este espléndido monumento natural.