Francisco Xabier Almuiña Chorén, Presidente de FEGATUR, reflexiona sobre el papel que realizan los anfitriones, e inicia una serie de artículos en los que nos descubrirá cautivadores trazos sobre las historias de las casas de turismo rural de Galicia.
Alegra comprobar que cada vez más personas procuráis calidad y diferenciación a la hora de escoger alojamientos de turismo rural en Galicia. Evidentemente además de la espléndida y variada muestra de espacios emblemáticos, recursos naturales, culturales y turísticos del entorno, también influye la singularidad mostrada por los establecimientos rurales gallegos. La preciada oferta gastronómica y enológica que ofrecen un número significativo de ellos seguro que también ayuda a decidir. Incluso su proximidad a los Caminos de Santiago que hacen muy fácil reponer fuerzas y descansar cuando se peregrina.
Mas, si me lo permites, es la acogedora y generosa actitud de la gente anfitriona lo que la mayoría de las personas viajeras frecuentemente destacáis.
Es evidente que, en estos dos últimos años, la situación vivida ha mudado realidades y proyectos vitales, planteado nuevos retos, reclamado nuevas estrategias y calendarios en nuestras vidas, tanto en su cotidiano transcurrir, como en el ocio y en el trabajo.
Seguro que de lo antedicho tienes abundantes muestras en tu entorno.
De igual manera, la vida sigue mostrándose tal cual es en los alojamientos rurales de Galicia, en los que personas compañeras, lejos de rendirse, afrontan el día a día con esfuerzo y renovada esperanza.
Te invito a que te acerques un momento a sus vidas. Tengo para mí que es como dar, tras una larga marcha bajo el sol, con un asombrado rincón donde, de un pequeño manantial, fluye agua fresca. Bebes, te refrescas y tras un breve reposo reinicias con ímpetu renovado el resto de la jornada.
Sirva de admirado homenaje a todas las personas anfitrionas esta sencilla muestra que de ellas a continuación iré desgranando.
Un remanso de paz y sosiego en Carnota.
Era diciembre de 2019, cuando Begoña y José Manuel abrieron las puertas de su sueño. Lo hicieron en un momento en el que, según quienes parecían saber, el horizonte se atisbaba diáfano y con buenas previsiones. ¡Apenas tres meses después... un 14 de marzo de 2020 pasó lo que pasó!
Dos años y medio más tarde, emociona comprobar como mantienen encendida la ilusión en este remanso de paz y sosiego que con audacia tenaz construyeron a los pies del monte Pindo y frente a la bravura del océano. Gracias a su empeño, gente de aquí y de allá, incluso llegada de lejanas tierras, goza de Galicia. Lo hace atraída por la espléndida belleza con que la naturaleza nos regala, mas también con la bondad y generosidad que percibe en el trato que aquí se le dispensa.
En esta casa grande de la aldea de Froxán en O Courel, al pie de la legendaria fuente del Milagro y de un castaño del que impresiona tanto su porte como su forma, cada día durante más de quince años, Susana y Toño abrían las puertas a cuantas personas procuraban el encuentro con la naturaleza, el patrimonio y la cultura, de los que la comunidad que habita en los montes y valles de esta sierra es usuaria y custodia desde siempre.
Ahora, desde el pasado mes de marzo, Eliseo y Loli, son quienes dan la bienvenida. Lo hacen tras aceptar la propuesta de Susana de tomar el relevo.
Tras sopesar si seguir en Barcelona o venirse a vivir a la aldea y, dado que sus hijos ya se adelantaran al venir a trabajar aquí, decidieron aceptar el reto. Y eso a pesar de que, desde hace tiempo, negras sombras siguen intentando teñir de desaliento el futuro de esta tierra.
En la era, viejo escenario de hambres y abundancia, de trillas, risas y lamentos, bailes, aturuxos y cantigas, de encuentros y despedidas, afortunadamente se sigue escuchando la voz, cariñosa y amiga de la vecindad diciendo: Vuelve pronto, ¡que te esperamos!
En las tierras de Valdeorras, por donde transcurre el camino de invierno se encuentra esta casa que toma el nombre del emblemático río que discurre próximo. Detrás de sus muros de pizarra, que junto a las edificaciones acogen una huerta ecológica y el jardín, se respira ambiente de hogar, tranquilo y calmo, más también lleno de la positiva energía que transmite la juventud y el conocimiento de Susana, la anfitriona.
Y es que, esta joven ingeniera, tras recibir el testigo de sus padres, viene conectando con nuevos públicos gracias a su contacto con personas y herramientas que las nuevas tecnologías ofrecen, y que resultan fundamentales para imprimirle fuerza dinamizadora tanto al establecimiento que regenta como a la comunidad en la que vive.
En estos tiempos de incertidumbre alienta que personas jóvenes y bien formadas estén dispuestas a dar lo mejor de sí para dinamizar proyectos en el rural.
Cuando te acercas a disfrutar de las tierras de Monterrei, Verín o de la próxima villa portuguesa de Chaves, te acomodas en esta casa y sales a pasear por su jardín, rápidamente piensas que es el retiro que cualquiera soñaría. ¡Hasta juzgas acertado su nombre… eso sí, quedas con el deseo de saber cuál sería el retiro escogido por la condesa!
Desde el primer momento se nota que es algo nacido del cariño de su propietaria, Matilde.
¡Del cariño… y de su gusto por las cosas bien hechas! A la labor iniciada por sus padres, José Luís -fiel reflejo y digno heredero, persona encantadora e ilusionada por el bienestar de quienes allí se alojan- le añade disponibilidad y conocimiento, contribuyendo a que la casa, además de rezumar historia en sus rincones y detalles, sea de lo más entrañable y acogedora.
¡Inolvidable el desayuno en la galería con vistas al jardín mientras disfrutas de los cruasanes elaborados por la propia Matilde en su pastelería en Verín!
En la aldea de Valdín, en el ayuntamiento de A Veiga-Ourense cada rincón parece hablar de eternidad y evocar la inmensidad del universo. Bastará con que te nombre sus edificaciones y recordar su uso, para que concuerdes en tal afirmación. La antigua rectoral de A Veiga, fue rebautizada como la casita de las estrellas, y el pajar que hoy, en lugar de la suave y dorada paja acoge cálidas habitaciones, como Lar de Lúa.
Además, Eduardo, alma mater de Eido das Estrelas, siempre procura que camines más cerca del cielo, por buenas sendas y que vivas auténticas y hermosas experiencias de la mano de personas expertas de la comunidad local. Al despedirse vuelve a recordar que cualquiera época del año es buena para acercarse, que siempre habrá gente de fiar para poder seguir conociendo y gozando de la sierra y de buena compañía.
En este refugio rodeado de piedra, naturaleza e historia que se yergue en las ricas tierras de Arbo, olvidarás el estrés y las prisas y disfrutarás con el silencio y la harmonía.
Así comienza Soraya la experiencia enoturística que acompaña en el pazo. Finaliza recordando que bastará con que abras una de sus ventanas y contemples el paisaje, con que dejes volar tu imaginación paseando entre viñedos para gozar calmadamente de la vida.
Gracias a las experiencias enoturísticas, te resultará fácil sumergirte en el sabroso, sugestivo y embelesador mundo del vino.
Patricia y Henrique quedaron embrujados por una antigua escuela rural que, en las montesas tierras del ayuntamiento de A Lama, silenciosa parecía llevar años esperándoles. Creyeron que, tras ese amor a primera vista, bastaría con devolverle su belleza y esplendor primeros para darle nueva vida. Desconocían que también ellos quedarían bajo los efectos de tal embrujo, haciendo que mudasen para siempre de perspectiva. Así que desde que el año 2003 abrieron Cas do Mestre -rehabilitada con mimo y convertida en un remanso de paz Entre bosques y montes que de cerca vigilan las Rías Baixas- cuando pasan delante de alguna construcción que les guiña el ojo, sucumben de nuevo.
Con la excusa de satisfacer los deseos de la gente, son quienes de prepararlos, decorar y ofrecer un lugar para relajarse, descansar y dejar atrás el estrés. Y todo con un servicio de atención personalizado y de calidad. Dicen que su mayor satisfacción al parecer es que la mayoría repiten cada año. ¡Como si de un mágico pacto sellado entre ellos se tratase!
Turismo Rural de Galicia, un turismo mucho más que saludable.
Afortunadamente como vienes de leer, personas que trabajan en el sector son ejemplo cotidiano de que el Turismo Rural de Galicia se asienta sobre bases firmes y reconocibles, pleno de singulares y destacadas bondades.
Nuestra tierra es destino referente para personas viajeras que, como tú, también en el turismo apostáis por unos valores, experiencias y propuestas claras, atractivas y homogéneas, con herramientas, acciones y actividades amparadas en lo que establece el marco normativo vigente.
Sólo huyendo de una oferta inmobiliaria turísticamente abusada, genérica, diluida y masificada es posible gozar de un turismo rural saludable, sostenible, seguro, tranquilo y de calidad.
¡Por eso, permíteme que te felicite! Optar por el turismo rural además de una decisión inteligente, es una forma fácil de seguir apostando por Galicia. Son estos apoyos los que nos alientan y dan fuerza para seguir, convirtiéndonos en incansables en la conquista de los corazones de personas como tú.
Los establecimientos de turismo rural somos una opción diferenciadora, sostenible y de calidad y conformamos una privilegiada red de alojamientos en lugares emblemáticos de Galicia. Desde la Federación Galega de Turismo Rural (FEGATUR) promovemos la coordinación, integración y confianza dentro del propio sector y con la oferta complementaria.
La experiencia cotidiana sigue alentándonos en la creación y el reforzamiento de redes colaborativas de calidad, procurando siempre la sostenibilidad y la excelencia. Por eso interactuamos con otros agentes de la cadena de valor (establecimientos de restauración, espacios expositivos, de ocio y museísticos, empresas de transporte, de turismo activo, de guías, asociaciones y colectivos vinculados al Camino y al desarrollo del rural). De esta forma surgen sinergias que permiten integrar nuevos y sugerentes paquetes y ofertas, dirigidas tanto a público gallego como nacional e internacional.
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La web www.galiciaturismorural.es es la forma más sencilla de encontrar una pronta, amplia, rentable y sostenible respuesta.
Si eres la persona encargada de buscar para tu grupo, estás en el sitio adecuado. Son estos, tiempos cargados de oportunidades propicias y ocasiones para grupos diversos (seniors, familias, singles, etc.). En el turismo rural de Galicia disponemos de una amplia muestra de novedosas y sugestivas experiencias, de las que muchas de ellas podréis gozarlas en diferentes épocas del año.
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